miércoles, 13 de junio de 2007

13.48., cualquier día del mes de junio

Cuando uno está a punto de empezar una nueva vida el miedo se apodera de tu persona. No siento miedo, sino ansias por enfrentarme al cambio. Es algo necesario en mi manera de ser, creo que he cumplido ya con un ciclo de mi vida, y es que en mi tierra siempre habrá sitio para la vuelta, pero a mi edad y dadas mis aspiraciones necesito salir de aquí un tiempo.

Un día volveré, realmente en poco tiempo, esta situación de momento sólo se prolongará un año, después regresaré. Regresaré pero para volver a partir, quizás a Madrid o quizás a otro país como tengo en mente.

Quiero formarme, seguir formándome. Dos carreras no son suficientes para mí, no es que se trate de conseguir seis más, sino de cuanto más aprenda, más inquietudes podré tener por aprender otras cosas.

Como os he dicho muchas veces, la gente que consideraba más próxima a mí (amistades) tiene otro tipo de inquietudes, y yo no las comparto. No quiero ser una marujona de aquí a dos o tres años, basicamente porque me niego a serlo y además es que me quedan tantas cosas por hacer en esta vida antes de convertirme en mamá y en compañera...

Supongo que es cuestión de gustos, de ideales, de prioridades..., pero mi humilde opinión es que si ahora mismo no sueñas e intentas hacer realidad esas ilusiones, un día te darás cuenta de que el tiempo a pasado y probablemente surjan otras prioridades que te impidan conseguir lo que anhelabas.

Repito, quiero empezar mi nueva vida, poco a poco ir probándome a mí misma en otro entorno, rodeada de los míos pero sin estar en mi territorio. Para a la vuelta, salir pero yo sola y entonces ya sin los míos, y así enfrentarme de verdad a LA VIDA.

1 comentario:

carmncitta dijo...

creo que es lo mejor, renovar, salir, aprender, te sentará genial, verás :)